Ser agradecidos
Es muy bueno estar siempre agradecidos, y todavía mucho mejor llegar a expresar nuestro agradecimiento.
Intentemos no guardarnos las “gracias”, aprovechemos cada oportunidad que tengamos para hacerle saber a las personas que han contribuido a nuestra felicidad.
El ser agradecidos es algo que debiéramos intentar poner en practica a diario. Hay muchas personas con las cuales o por las cuales podríamos estar agradecidos, como personas que se cruzan por nuestra vida, personas a las hemos olvidado y otras que se han olvidado de nosotros, pero que pese a ello, de una forma fugaz, formaron parte de nuestra vida, Gracias y nos han dejado algo para recordar, como un gesto, una palabra o una simple sonrisa.
Pocas veces pensamos la importancia de dar las gracias, sin embargo, su poder es mucho más profundo de lo que puedes imaginar. Varios estudios han demostrado que mediante el agradecimiento no sólo conseguimos mejores resultados, sino que además mejoramos nuestra salud.
El hecho de dar gracias por algo , mejora notablemente nuestra salud, mejorando nuestro ritmo cardiaco ,entre otros factores. Cuando mostramos agradecimiento, nuestro corazón muestra menos “arritmia”, entra en un estado de coherencia muy beneficioso para nuestras defensas, exactamente las inmunoglobinas tipo A, nuestra primera línea de defensa en el organismo. Por supuesto, no sólo se trata de agradecer, sino de sentirse agradecido.
Hemos de ser honestos a la hora de agradecer las cosas que los demás hacen por nosotros, , hemos de sentirnos agradecidos. Es importante ser sinceros al darles las gracias, pues de alguna manera les estamos mostrando lo que significan para nosotros, y lo mucho que nos aportan.
De igual manera, hemos de ser honestos con nosotros mismos, hemos de saber qué es lo que queremos escuchar, y si lo necesitamos pedirlo.
Piensa en las veces que te hubiera gustado que alguien te hubiera dado las gracias por algo que hiciste, y piensa en las veces que has dejado pasar la oportunidad de agradecer a otros lo que han hecho.
Así que, la próxima vez que alguien te retire el plato de la mesa en un restaurante, o en el bar, recuerda lo importante que puede llegar a ser para esa persona que alguien le dé las gracias, y si va acompañado de una sonrisa mejor que mejor.