El mundo 5.000 años antes del nacimiento de Jesús Cristo
El V milenio a. C. comenzó el 1 de enero de 5000 a. C. y terminó el 31 de diciembre de 4001 a. C.
Acontecimientos destacados:
- 5000-4900 a. C.: grupos nómadas se establecen en el valle del río Nilo (río de África que nace en el lago Victoria y desemboca en el mar Mediterráneo). Se agruparon en tribus y posteriormente en aldeas.
- En la actual Irak se desarrolla un sistema de escritura, posiblemente ideográfico.
- En la cultura Vincha (Serbia) se desarrolla la «escritura Vinča» y se escriben las tablas de Tartaria (Rumanía).
- En el Sudeste de Asia se empieza a cultivar arroz. Más tarde será exportado al valle del río Ganges (India).
- La agricultura alcanza la costa atlántica de Europa (proveniente desde Oriente Próximo). El Neolítico en la península ibérica se calcula que empieza en el 5000 a. C.
- En Centroamérica y México se desarrolla el cultivo del maíz.
- En la isla de Malta, agricultores neolíticos —posiblemente inmigrantes desde la región siciliana de Agrigento— entran en la fase Għar Dalam (hasta el 4500 a. C.).
- Comienza la trasgresión Peron Antigua, un periodo cálido que dominará todo este milenio.
- Empieza a hablarse el idioma protoindoeuropeo, probablemente en la cultura de Samara en la zona de Ucrania (al norte del mar Caspio) o en los Balcanes.
- En China comienza la cultura de Yangshao.
- Los antepasados de los fenicios fundan Biblos (30 km al norte de la actual Beirut (Líbano).
- Desarrollo de la rueda en Mesopotamia y la India.
- A lo largo del milenio crece ligeramente la población mundial, tal vez de 5 a 7 millones de personas.
De la Prehistoria a la Edad Antigua:
LA PREHISTORIA
Es etapa que comenzó con la aparición del ser humano hace un millón de años y acabó con la invención de la escritura hace 3.000 años. Se divide en tres periodos: Paleolítico, neolítico y Edad de los Metales.
PALEOLÍTICO
Los seres humanos que habitaron en esta época vivían de la caza, la pesca y la recolección de frutos silvestres, eran nómadas, es decir, iban de un lado a otro buscando alimento, fabricaban herramientas con piedra y hueso se organizaban en tribus y vivían en sencillas cabañas o en cuevas, además descubrieron el fuego y aprendieron a usarlo.
NEOLÍTICO
En esta época los seres humanos comenzaron a cultivar plantas y a domesticar animales, esto sucedió hace unos 7000 años. Construyeron las primeras aldeas o poblados, se convirtieron en sedentarios, las herramientas estaban construidas con piedra pulida, aprendieron a fabricar tejidos y objetos de cerámica, además se produjo la especialización del trabajo en las aldeas.
EDAD DE LOS METALES
Hace unos 6000 años, los seres humanos aprendieron a fabricar objetos de metal: primero de cobre, más tarde de bronce y finalmente de hierro, las aldeas crecieron y se convirtieron en pequeñas ciudades. En las ciudades eligieron a un jefe para organizarse mejor y protegerse, además inventaron la rueda, la vela y el arado.
PRIMEROS ARTISTAS
- En el paleolítico los seres humanos pintaban en las paredes y los techos de las cuevas, realizaban pinturas rupestres, es decir, realizaban pinturas sobre animales.
- En el Neolítico comenzaron a representar escenas de caza y de grupos bailando, empleaban un solo color y las figuras eran muy esquemáticas.
- En la Edad de los Metales construyeron monumentos megalíticos llamados: menhires, dólmenes y crómlechs.
LA EDAD ANTIGUA
La Edad Antigua es la etapa que comienza con la invención de la escritura hace 3000 años y acaba con la llegada a la Península de los pueblos germanos en el siglo cinco.
HISPANIA ROMANA
En el 218 antes de Cristo, los romanos desembarcaron en Emporio (Ampurias) para enfrentarse a los cartagineses, la conquista fue larga, hasta que en el año 19 antes de Cristo el emperador Augusto la dio por finalizada.
Los romanos dividieron Hispania en provincias y al frente de cada una había un gobernador.se implantaron las leyes romanas y el latín, solo pervivió una lengua, el euskera. Al principió, se adoraba a los dioses romanos, pero en el año 380, el cristianismo se convirtió en la religión oficial.
La sociedad se distribuía en hombres libres y hombres esclavos, mujeres libres y mujeres esclavas, aunque las mujeres no tenían los mismos derechos que los hombres.
La actitud de la Iglesia de cara a las teorías de la evolución
Son varias, es de prudencia. Reconoce que parten de hipótesis científicas serias, dignas de ser tenidas en cuenta, pero que hay que estar atentos de cara a su interpretación.
No es admisible, por ejemplo, una interpretación de tipo materialista, que excluya la causalidad divina. De cara al origen del hombre, se podría admitir la posibilidad de una evolución en cuanto al cuerpo, pero sabemos por la Revelación, así como por una sana filosofía, que el alma humana, que es espiritual, no puede surgir de la materia, sino que implica una creación directa por parte de Dios.
A este respecto, puede ser útil leer un documento de Juan Pablo II
En el que trató el tema, del cual está tomada esta cita: «Teniendo en cuenta el estado de las investigaciones científicas de esa época y también las exigencias propias de la teología, la encíclica Humani generis consideraba la doctrina del evolucionismo como una hipótesis seria, digna de una investigación y de una reflexión profundas, al igual que la hipótesis opuesta.”
Pío XII añadía dos condiciones de orden metodológico:
Que no se adoptara esta opinión como si se tratara de una doctrina cierta y demostrada, y como si se pudiera hacer totalmente abstracción de la Revelación a propósito de las cuestiones que esa doctrina plantea. Enunciaba igualmente la condición necesaria para que esa opinión fuera compatible con la fe cristiana.[…] Pío XII había destacado este punto esencial: el cuerpo humano tiene su origen en la materia viva que existe antes que él, pero el alma espiritual es creada inmediatamente por Dios «animas enim a Deo immediate creari catholica fides nos retinere iubet»: encíclica Humani generis: AAS 42 [1950], p. 575).
En consecuencia, las teorías de la evolución que, en función de las filosofías en las que se inspiran, consideran que el espíritu surge de las fuerzas de la materia viva o que se trata de un simple epifenómeno de esta materia, son incompatibles con la verdad sobre el hombre. Por otra parte, esas teorías son incapaces de fundar la dignidad de la persona» (Juan Pablo II, Mensaje a los miembros a la Academia Pontificia de Ciencias, 22 de octubre de 1996).
En otro texto se había expresado de modo semejante:
«En cuanto al aspecto puramente naturalista de la cuestión, ya mi inolvidable predecesor, el Papa Pío XII, en la encíclica Humani generis, llamaba la atención en 1950 sobre el hecho de que el debate referente al modelo explicativo de evolución no es obstaculizado por la fe si la discusión se mantiene en el contexto del método naturalista y de sus posibilidades […]. Según estas consideraciones de mi predecesor, una fe rectamente entendida sobre la creación y una enseñanza rectamente concebida de la evolución no crean obstáculos: en efecto, la evolución presupone la creación; la creación se encuadra en la luz de la evolución como un hecho que se prolonga en el tiempo – como una creatio continua – en la que Dios se hace visible a los ojos del creyente como ‘Creador del cielo y de la tierra’» (Juan Pablo II, discurso en el Simposio científico internacional sobre Fe cristiana y teoría de la evolución, 26 de abril de 1985).
A este respecto, científicos y teólogos, han gastado litros de tinta y kilos de papel
Por lo que podría parecer algo simplista pretender responder a este tema en breves líneas. Sin embargo podemos responder lo siguiente: La teoría de que Dios se sirvió del cuerpo de un mono para hacer al primer hombre se llama evolucionismo. Esta teoría no está condenada por la Iglesia, desde la fe y la filosofía no hay inconveniente en admitir la teoría de la evolución.
La respuesta de la veracidad de esta teoría nos la debe dar la ciencia, pues hasta el momento no deja de ser eso, una teoría. De hecho, la teoría de la evolución no elimina la necesidad de una inteligencia ordenadora. Admitir el orden de este mundo y no preguntarse por su causa, es como encontrarse un televisor en lo alto de un monte y atribuirlo a la casualidad . Los textos de la Biblia no tratan de darnos una explicación científica del modo cómo fueron hechos Adán y Eva, sino algo mucho más profundo: el hombre es obra de Dios y la mujer de la misma naturaleza que el hombre .
La Teoría de la evolución, pone en evidencia todos los descubrimientos que se han hecho en este campo gracias a la paleontología y en los que se observa cómo poco a poco, (después de miles y millones de años) los homínidos fueron transformándose hasta que “dieron lugar” al hombre. Estos estudios evidencian una cosa de la que no podemos dudar: el hombre tiene muchas cosas en común con el mundo viviente inferior a él, y de modo especial con la familia de los monos. Esta es una verdad en la que la ciencia ha ido profundizando cada vez más y que permite pensar que la teoría de la evolución hoy día es la explicación más racional.
Lo que a veces no se recalca de igual manera
Es que el hombre por sus manifestaciones de inteligencia, voluntad y capacidad de amar… se separa claramente de los demás monos. Esto es lo que la Iglesia se esfuerza por comunicar: que el hombre no es pura materia sino que tiene espíritu y el espíritu no evoluciona. La ciencia podrá explicar cómo ha ido evolucionando el cuerpo, cosa que la Iglesia no sólo no tendrá problemas en aceptar, sino que la acogerá, pero lo que nunca podrá probar la ciencia es que “haya evolucionado el alma”.
Resumiendo:
La Iglesia acepta que para la creación del hombre, Dios se pudo valer de una “materia” que ya existía (los homínidos) y que perfeccionó, a la que añadió el alma espiritual y racional, creando así al hombre. Además la Iglesia enseña que Dios no sólo dio el alma al primer hombre, sino que la da a cada hombre que viene al mundo, que la crea. Con esto rechaza cualquier interpretación que diga que todo el hombre (alma y cuerpo) descienden del mono, porque si toda alma es creada por Dios, ya no hay lugar para la evolución.
Para una mayor profundización se recomienda leer las siguientes obras:
– S.S. PIO XII: Carta Encíclica “Humani generis”, LEV.
– ALEJANDRO OPARIN: Origen de la vida sobre la Tierra, V. Ed. Tecnos. Madrid, 1970
– SALVADOR DE MADARIAGA: Dios y los españoles, pg.37. Ed. Planeta. Barcelona, 1975
– FRED HOYLE: El Universo inteligente, I, 1. Ed. Grijalbo. Barcelona, 1984
– PIERO PASOLINI: Las grandes ideas que han revolucionado la Ciencia en el último siglo, I, 4. Ed. Ciudad Nueva. Madrid, 1981
– SEBASTIÁN BARTINA, S.I.: Hacia los origenes del hombre, I, 1. Ed. Garriga. Barcelona
– DR. BERMUDO MELÉNDEZ, Catedrático de Paleontología en la Universidad Complutense de Madrid: Las bases científicas del evolucionismo, pg. 89. Ed. ADUE. Madrid
– ROBERT JASTROW: El telar mágico. Ed. Salvat. Barcelona, 1985
– P. JORGE LORING, S.I. : El origen del hombre a la luz de la ciencia actual y de la Biblia. (video)
Fuentes varias.