En la estrategia contra la obesidad podríamos ser líderes mundiales: no perdamos el impulso
El nuevo primer ministro británico, Rishi Sunak, tiene mucho que enfrentar en este momento de incertidumbre económica en el Reino Unido. Pero priorizar la salud de la nación y tomar medidas contra la mala alimentación y el peso corporal no saludable debe ser una prioridad en su agenda.
Cumplir con la legislación contra la obesidad existente y programada no solo beneficiará la salud de las personas, sino que también impulsará la economía del Reino Unido. Las dietas más saludables mantienen a las personas en el trabajo , lo que mejora la productividad en el lugar de trabajo y ayuda a reducir millones de libras del gasto público en el NHS.
En septiembre de 2022, el gobierno de Liz Truss ordenó una revisión de toda la estrategia contra la obesidad para Inglaterra. Esta revisión incluía la posibilidad de eliminar el impuesto a los fabricantes de bebidas azucaradas (lo que ha resultado exitoso en la reducción de la cantidad de azúcar que compran los hogares) y detener la legislación para limitar la comercialización de alimentos no saludables en línea, en la televisión antes de las 9 p. m. y en puntos de venta minorista.
A pesar de los discursos de Truss de no «estado niñera» , la legislación entró en vigor el 1 de octubre de 2022 que restringe la forma en que los minoristas promueven alimentos poco saludables. Las tiendas de toda Inglaterra ya no pueden colocar alimentos poco saludables en lugares destacados, como las entradas, las cajas y al final de los pasillos.
Esta es una versión suavizada de la legislación completa que también prohíbe las promociones de compras múltiples, como «compre uno, llévese otro gratis», en alimentos poco saludables. El gobierno de Boris Johnson retrasó intencionalmente este componente hasta octubre de 2023 para ayudar a las familias a hacer frente al aumento del costo de los alimentos. Desafortunadamente, la evidencia muestra que este tipo de promociones aumentan la cantidad de alimentos poco saludables que las personas compran y consumen.
Un buen comienzo
A pesar de ser diluida, la legislación es un buen comienzo para crear diseños de tiendas que animen a las personas a tomar decisiones más saludables.
Nuestro grupo de investigación y otros han demostrado que alejar los alimentos poco saludables de las entradas de las tiendas, las cajas registradoras y los extremos de los pasillos, y reemplazarlos con alternativas saludables o no alimentarias, puede mejorar los hábitos alimenticios y de compra de las personas, incluso entre las familias con dietas más pobres.
Muchos minoristas han hecho cambios para mejorar después del anuncio de esta nueva legislación. Han invertido tiempo y dinero en comprender su complejidad, reacondicionar las tiendas, probar qué promociones más saludables funcionan y cambiar los ingredientes de los productos para que sean más saludables y puedan seguir comercializándose.
Desafortunadamente, algunas tiendas están aprovechando lagunas en la legislación
Por ejemplo, ciertos puntos de venta han estado promocionando el alcohol al final del pasillo y creando nuevas exhibiciones promocionales de dulces, papas fritas y bebidas azucaradas en medio de los pasillos para impulsar las ventas. El cumplimiento tampoco es del 100%.
Nuestro equipo de investigación preguntó a los consumidores, las empresas, los trabajadores de la salud y los encargados de hacer cumplir la ley qué pensaban sobre esta nueva legislación. También llevamos a cabo una conferencia para ayudar a las empresas y los encargados de hacer cumplir las leyes de las autoridades locales a comprender su complejidad. La mayoría de la gente cree que la nueva legislación puede ayudar a todos a comer mejor, pero como lo muestran las últimas semanas, se debe monitorear cómo las tiendas implementan las reglas y el gobierno debe hacer más para cerrar las lagunas.
Las empresas, especialmente las pequeñas y medianas empresas, también se beneficiarían de un apoyo adicional para navegar por la nueva ley, ya que no cuentan con el respaldo legal que tienen las empresas más grandes.
Las autoridades locales también están sobrecargadas por la pandemia y los años de austeridad y tienen poca capacidad para priorizar problemas de salud a más largo plazo sin financiación adicional.
Ciclo de la comida chatarra
Para abordar las dietas poco saludables y la obesidad de una manera que brinde a todos en el Reino Unido la misma oportunidad de estar saludables, el gobierno debe implementar políticas que cambien los entornos alimentarios y el sistema alimentario en la fuente del problema. La industria alimentaria y sus clientes están atrapados en lo que se ha descrito como el ciclo de la comida chatarra , en el que los alimentos poco saludables son baratos de hacer, muy rentables, atractivos para comer y asequibles para comprar.
La legislación contra la obesidad del gobierno del Reino Unido debe mantenerse y ampliarse para romper el ciclo de la comida chatarra. Medir cómo estas políticas afectan los alimentos que la gente compra y come confirmará que son el enfoque correcto.
El compromiso continuo con la legislación que restringe la cantidad de empresas que pueden promover y publicitar alimentos poco saludables y alejarse de los enfoques que dependen de los individuos para realizar cambios consolidaría la posición del gobierno del Reino Unido como líder mundial en este importante problema.
Autores:
· Cristina Vogel– Profesor asociado, Universidad de Southampton
· Preeti Duria – Gerente de Proyecto, Centro de Epidemiología MRC Lifecourse, Universidad de Southampton
· Sara Muir – Investigador, Centro de Epidemiología MRC Lifecourse, Universidad de Southampton
Fuente: The Conversation UK
Traducción, Omar Romano Sforza